¿Qué es el quiromasaje?

Es una rutina o esquema de tratamiento y acondicionamiento del sistema músculo-esquelético, principalmente de las partes blandas, como el músculo y tejido conectivo. Está compuesto por una serie de maniobras (tales como amansamiento, presiones deslizantes, estiramientos y movilizaciones sencillas) que van aumentando de complejidad según avanza la rutina y se pretende alcanzar el tejido muscular de planos anatómicos más profundos.

Estas maniobras están inspiradas en el masaje sueco y tienen por principal objetivo aliviar la tensión muscular, disminuir la sensación dolorosa que esta provoca y preparar los tejidos blandos para maniobras o técnicas más específicas, más avanzadas, propias de la fisioterapia moderna y no del masaje. Estas últimas son las que sí resuelven desde el origen dichos trastornos o disfunciones musculares y fasciales y es ésta la metodología que utilizamos en la formación de nuestros futuros profesionales.

¿Existen diferentes enfoques del quiromasaje según su aplicación?

Este sistema de tratamiento (quiromasaje) tiene dos enfoques o terrenos de aplicación diferentes, que resultan filosóficamente contrapuestos, aunque no incompatibles, y que, por lo tanto, se debe ser consciente que al hacerlo de una manera u otra se conseguirán resultados muy diferentes. Este entendimiento evita la decepción y posterior frustración por parte del terapeuta que al aplicarlo y no conseguir resolver lo que a priori pensó lograr, y por parte del paciente/cliente tener claro cuales son los objetivos del tratamiento y por tanto los resultados que podrás ser logrados. 

Cuando el quiromasaje se aplica con la finalidad de reducir la sensación dolorosa que proviene de una tensión muscular o una restricción fascial, objetivo identificativo del masaje, resulta muy eficaz, al menos a corto plazo. Para lograr esto la sesión de quiromasaje se organiza siguiendo un esquema o conjunto ordenado de pasos donde se van alternando diversas maniobras, en principio muy sencillas y luego más complejas y se insiste en aquellas zonas donde el masajista encuentra signos palpables de “tensión muscular” al que se denomina regularmente como “contracturas” o “nudos”. El mayor o menor éxito de estas maniobras para resolver estos signos hallados muchas veces dependen más de cuestiones inherentes al propio paciente y de su capacidad para relajarse que del efecto probado de estas maniobras para resolverlas. Esta claro que estas sesiones de quiromasaje si alcanzan con total seguridad un nivel de confortabilidad, relajación y efecto neurosedante que algunas veces es más valorado por el paciente que los efectos terapéuticos que pudiera tener. Todo depende del requerimiento previo que el paciente o cliente nos halla expresado. 

Cuando el quiromasaje forma parte de un sistema terapéutico, más propio de la fisioterapia moderna, resulta una herramienta terapéutica muy útil. Su enfoque, ahora, está dirigido a la preparación de dichos tejidos blandos, para aplicar sobre ellos, más tarde, otras técnicas específicas (técnicas neuromusculares, miotensivas, de inducción fascial, de movilización articular, de facilitación, propioceptivas, etc.), que sí resuelven estas disfunciones miofasciales, que a su vez suelen ser la causa mecánica de síndromes dolorosos complejos o alteraciones biomecánicas que causan alteraciones del movimiento en los pacientes. Por otro lado cuando se resuelve de esta manera estos problemas complejos, su efecto además de ser mucho más duradero es también más eficaz. 

Teniendo en cuenta esta diferenciación, en cuanto a los objetivos de aplicación del quiromasaje, es que se puede esperar un resultado u otro. Esto no solo marca la diferencia del éxito terapéutico sino que además se ciñe, o no, al razonamiento científico que es lo que nos permite poner luz en lugar de oscuridad. 

¿Tiene el quiromasaje alguna base científica?

Evidentemente existe mucha literatura científica al respecto y revisiones específicas a cerca del efecto y beneficio del masaje en general y por tanto del quiromasaje. Algunas de ellas se citan más abajo y pueden ser leídas al completo en diversas bases de artículos científicos muy conocidas como PubMed, por ejemplo. 

Se deja bastante claro que su efecto sobre el dolor en diversas circunstancias y disfunciones músculo- esqueléticas no es nada desdeñable y que tiene un beneficio real sobre quien la recibe. 

En mi caso tengo una visión particular del quiromasaje, producto de mis más de 30 años de experiencia clínica y formación tanto universitaria como privada) y es lo que a su vez reflejo en mis alumnos. Según mi visión, el quiromasaje, tiene una finalidad básica o primaria como masaje, pero también puede, y así lo recomiendo, ser utilizado como vía de abordaje terapéutica, en los pacientes, en las clínicas de fisioterapia moderna

Además el aprendizaje del quiromasaje tiene un efecto educador y de entrenamiento para las manos del futuro terapeuta, le pone en contacto con el tejido, su arquitectura, su renitencia, la anatomía de superficie normal y la maleabilidad normal de los diferentes tejidos o grados de restricción que se pudiera encontrar.   

Bibliografía:

  • Diederik, et al. Massage therapy has short-term benefits for people with common musculoskeletal disorders compared to no treatment: a systematic review. 2015. Fuente: PubMed.
  • Susan Lee King yuan, et al. Effectiveness of different styles of massage therapy in fibromyalgia: a systematic review and meta-analysis. 2014. Fuente: PubMed.
  • Young-ran Teun, et al. Effectiveness of massage therapy for shoulder pain: a systematic review and meta-analysis. 2017. Fuente: PubMed.

¿En qué consiste la formación en quiromasaje?

Dado que la formación en esta forma de masaje, llamada quiromasaje, no esta reglada en España, no existe una guía oficial sobre los contenidos o destrezas que se deben trabajar en un alumno. Sin embargo esto no significa que no pueda impartirse dicha formación; eso si, desde un ámbito privado y sujeto al criterio de quienes dirigen dicho lugar.

Según mi modo de ver esta profesión y basado en mi extensa trayectoria y experiencia profesional, creo que es muy importante distinguir la orientación particular que se ha de dar al curso de quiromasaje en los distintos centros de formación ya que según comenté anteriormente puede ser impartido con una visión propia del masaje, con sus enormes limitaciones terapéuticas o desde una óptica más propia de las terapias manuales y la fisioterapia, es decir integrado dentro de un sistema de razonamiento científico y con las competencias bien claras.  

En el Instituto de Terapias Manuales, de Bilbao, tenemos muy claro, desde hace más de 30 años, que lo más importante es brindar al futuro profesional tanto los conocimientos científicos de base (anatomía, fisiología músculo-esquelética y biomecánica) de una forma rigurosa y a la vez amena para que pueda ser comprendida y aplicada al quiromasaje de forma clara y sencilla y sin que esto suponga una carga de estudios difícil de asimilar por parte de muchos alumnos; como aprender las técnicas más actuales para resolver esos problemas músculo esqueléticos desde su raíz, como explique anteriormente.  

Por otro lado hemos diseñado un plan de estudios completo, actualizado e integrado a la práctica del quiromasaje, de manera que en todo momento nuestros alumnos aprender a relacionar y aplicar lo aprendido en la teoría con la práctica que le continúa, formando así un continuo donde el principal beneficio es la agilidad del aprendizaje, la claridad de los conocimientos aprendidos y de poder integrar todo en la práctica.

Si a esta propuesta le agregamos la participación práctica de toda nuestra experiencia terapéutica, como clínica de fisioterapia que somos desde 1991, se convierte en una fórmula de éxito seguro para el posterior desarrollo profesional de nuestros alumnos. 

Además cuentan con la posibilidad de realizar prácticas reales en nuestra clínica que no solo sirve para enfrentarse con el mundo laboral real sino que además reafirma la seguridad de lo aprendido y otorga mayor confianza en sí mismo.